Este jueves, Paul McCartney ofreció un íntimo show en The Cavern, histórico local de su natal Liverpool donde The Beatles se presentaron recurrentemente en su primera etapa.
Pidiéndole a los cerca de 200 fans que dejaran de lado los celulares y no tomaran fotos, el cantautor y bajista ofreció un set de 28 canciones, buena parte de ellas del catálogo de la banda que lo catapultó a la fama, y un puñado de piezas de su próximo disco de estudio, Egypt Station.
"Volver aquí es bastante sorprendente para mí", dijo el músico, de 76 años. "Imagínense esto: hace tantos años, cuando tocamos en The Cavern por primera vez, no sabíamos si tendríamos futuro".
El show de este jueves fue sorpresa, y las entradas se distribuyeron después de que el británico anunciara el espectáculo en sus redes.
La última vez que McCartney había tocado en The Cavern fue en 1999, en esa oportunidad acompañado por otros ilustres como David Gilmour y Ian Paice.