Sichel aclara de inmediato que “heredé 2 contratos, uno hasta el 2030 y otro al 2043 suscritos por el gobierno anterior. Vigentes, tomados de razón por la Contraloría y, por lo tanto, tengo que cumplirlos”.
Y hasta ahora, pese a la polémica por el trato con Soquimich principalmente, “no hemos encontrado causales (para terminar contratos por litio) y estamos fiscalizando”.
De este modo, hasta el 2030 no se puede tocar los acuerdos “porque estamos obligados contractualmente, salvo que alguna de las empresas incumpla con las obligaciones ambientales, de pago de patentes, de procesos de fiscalización”.
Respecto de las proyecciones sobre este mineral y su participación en la economía nacional, Sichel lo comparó con el metal rojo. “Cobre representa la actividad económica número 1 con una línea arriba del 20% del PIB. Aquí estamos hablando que en el mejor de los negocios, (litio) va a llegar al 1,4, 1,5%” alrededor del 2040.
Por tanto, “el verdadero debate del litio no tiene que ver tanto con la nacionalización”.
El vicepresidente ejecutivo de la Corfo también detalló cuáles son las prioridades en su incipiente gestión. Admite que “problema de la Corfo actual es que ha puesto barreras de entrada para acceder a financiamiento”. De hecho, “tenemos 144 instrumentos” para lograr recursos, por lo que los emprendedores “tienen que ser como expertos en la Corfo”.
Por tanto, la idea es “entregar plataformas para que estos emprendimientos sean cada día más exitosos, pasen de ser de emprendimiento a empresas, puedan salir a los mercados internacionales” por medio de facilidades en los procesos de postulación.