Robbie Williams fue el encargado de animar la ceremonia inaugural del Mundial de Rusia 2018, participación que estuvo marcada un obsceno gesto a las cámaras de transmisión.
Mientras cantaba "Rock DJ", el ícono del pop británico levantó el dedo de enmedio a los millones de televidentes que veían en todo el mundo la obertura del evento deportivo.
Si bien se especuló mucho sobre los motivos de su gesto, el propio Williams explicó la situación y dijo que tenía que ver con el partido entre Rusia y Arabia Saudita, que venía después.
En conversación con el matinal inglés This Morning, el artista dijo que mostró el dedo para indicar "que quedaba un minuto para el inicio del partido".
"Estaba muy presionado porque quedaba sólo un minuto y no sabía qué hacer en ese tiempo. Así que hice una cuenta regresiva de un minuto", añadió, en declaraciones reproducidas por NME.
En esa línea, el cantante habló de su comportamiento, y aseguró que nunca es consciente de lo que está haciendo.
"El plan era cantar en el tono, no equivocarme. Ese era el 99% del plan, y lo logré. Nada más pasa por mi cabeza (...) Hay un bloqueo entre mí y mis sentidos, y si algo ocurre, cinco minutos después estoy tipo 'Qué acabo de hacer... sí lo hice, ¿o no?'".