La hija de Elvis Presley, Lisa Marie Presley, se declaró en quiebra, tras asegurar que le quedan 14 mil dólares de los más de 100 millones de dólares que heredó del fallecido músico.
Por lo anterior demandó a su exrepresentante, Barry Siegel, por “manejo imprudente y negligente de sus finanzas”, según publicó Daily Mail, ya que su fortuna se vio afectada por la fuerte inversión que su asesor realizó en el holding American Idol, el que terminó declarándose en quiebra.
Lisa Marie apunta a que Siegel le dijo que podía gastar el doble de sus ingresos anuales, siendo que esto lo que la llevó a la quiebra. Ella podría haber acomodado su estilo de vida de haber conocido su verdadera situación financiera, subrayó.
Por su parte Siegel y Provident Financial Management contrarrestaron sus dichos, afirmando que sus problemas de dinero se deben simplemente a su propio gasto exorbitante de dinero.