Entre los últimos, estarían “tanto los que estuvieron directamente involucrados en el caso (Karadima) como aquéllos que han tenido la máxima responsabilidad, es decir, las autoridades de la conferencia episcopal”, expuso el editorialista de Página 12 y experto en asuntos de iglesia y estado Vaticano.
Sobre reuniones con obispos, planteó que “institucionalmente, el episcopado chileno encubrió a los acusados de abusos sexuales. Esto es lo que al papa le molesta (…) Se sintió defraudado por la información que los propios obispos chilenos le dieron respecto del caso Karadima”.
“En ningún lugar hay un episcopado en conjunto que haya protegido a los abusadores como lo hizo en su momento parte de los obispos chilenos”, destacó Uranga.
Por tanto, este resultado “es una señal que el papa Francisco está dando para la iglesia chilena y mundial (…) está marcando una línea de conducta en los casos de pedofilia”, apuntó el periodista.
“Bergoglio es un hombre de decisiones firmes”, concluyó el analista.