Un nuevo estudio a los restos de Adolf Hitler confirmó que el dictador murió en su bunker al final de la Segunda Guerra Mundial.
Un grupo de especialistas franceses analizaron restos óseos que pertenecieron al dictador, a esta altura lo poco que queda de él: luego de su deceso en 1945, el cuerpo del genocida fue quemado, enterrado en secreto y luego escondido por la KGB.
"Las dentaduras coinciden con las descripciones proporcionadas por el dentista de Hitler y no revelaron rastros de carne, lo que es coherente con el hecho de que el Führer era vegetariano", explicaron los científicos en el estudio, publicado en el European Journal of Internal Medicine. "Eran auténticos, no hay ninguna duda, y nuestro estudio demuestra que Hitler murió en 1945", añadieron.
"Podemos detener todas las teorías de la conspiración sobre Hitler. No huyó a Argentina en un submarino, no está en una base oculta en la Antártida o en el lado oculto de la Luna", concluyeron.
Los restos fueron rescatados por soldados soviéticos durante la ocupación de Berlín.