Gerardo Varela, ministro de Educación, causó revuelo tras decir, en primer lugar, que se oponía a poner dispensadores de preservativos en los colegios, y luego que sus hijos son "unos campeones" y que les compra condones.
"Necesitan más de tres, parece", dijo.
El día después de sus controversiales dichos, el secretario de Estado hizo un mea culpa y reconoció que sus dichos fueron "inncesarios".
"Más allá de mis dichos de hoy (ayer) -una frase innecesaria- el tema de fondo es que no se trata de una confrontación valórica, sino de un tema de salud pública que nos debe convocar a todos como país", dijo a LUN.
"En los colegios este es un tema que se aborda con toda la comunidad escolar: padres, apoderados, alumnos, profesores", agregó.