Abdul Fattah al-Sisi fue reelecto como presidente de Egipto, con un apabullante 92% de las preferencias de la población.
Más allá de su claro triunfo, llamó la atención el nombre que salió segundo en los comicios: el de Mohamed Salah, delantero de 25 años y crack del fútbol inglés.
Salah, quien la rompe en el Liverpool, ni siquiera estaba en la papeleta y obtuvo cerca de un millón de votos. Superó a Moussa Mustafa, el otro candidato, que logró 3%, consigna InfoBae.
El jugador es la mayor esperanza de la selección de Egipto en el Mundial de Rusia, y en su actual club ha tenido un rendimiento envidiable: ha marcado 37 goles en 42 partidos.