El origen de la celebración del Día Mundial de la Marihuana nace a principios de los setenta -según la mayoría de los fumadores- por las andanzas de un grupo de estudiantes de la escuela San Rafael, al norte de California, en Estados Unidos.
Se cuenta que en 1971, los cinco amigos conocidos como "Los Waldos" se reunían a diario a las 4:20 de la tarde, al terminar sus clases, para fumar marihuana. Aunque también hay otros que dicen que en el otoño de ese mismo años, el grupo de adolescentes encontró un mapa dibujado que indicaba la ubicación de una plantación de cannabis y que las 4:20 fue la hora en que se reunieron para ir a buscarla.
Por otra parte, algunos sostienen que en 1995, unos 200 fumadores de esta planta se juntaron el 20 de abril para fumar en público en la ciudad de Vancouver, en Canadá, como un modo de protesta y reivindicando la despenalización de la cannabis.
Lo único cierto es que la subcultura del cannabis transformó ese número en el 20 de abril (el día veinte del mes cuatro) en el Día Mundial de la Marihuana, que a pesar del paso de los años sigue siendo materia de controversia en muchos países, donde todavía es penalizada su plantación, tenencia y consumo, publica Clarín.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud declaró que la marihuana medicinal no representa problemas para la salud. Concluyó que el Cannabidiol (CBD) sirve como paliativo para enfermedades crónicas y para pacientes con epilepsia y no genera adicciones. El Cannabidiol (CBD) representa el 40% de los extractos de la marihuana. Reduce el dolor y la inflamación, controla las convulsiones epilépticas y sirve para el tratamiento de enfermedades mentales o adicciones.