Un problema importante a la hora de pensar en la exploración espacial es el alimento en viajes prolongados. Sin embargo, los excrementos podrían ser de ayuda.
Según informa Science Alert, un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania encontró un método de descomponer los desechos humanos, tanto sólidos como líquidos, sin posibilidad de que desarrollen patógenos, dando como resultado un producto que podría nutrir a los astronautas.
Los especialistas mezclaron excremento artificial con un grupo de microbios en un sistema cilíndrico, de poco más de un metro de largo. Sin oxígeno, ocurrió un proceso similar al de nuestras entrañas, que descompuso el cúmulo original.
Además, los científicos lograron extraer los nutrientes de los desechos, y utilizaron un reactor microbiano para convertirlos en una especie de alimento, que tenía 52% de proteína y 36% de grasas.
Para bajar las posibilidades de desarrollar patógenos dañinos durante el proceso, lograron cultivar otros microbios útiles en ambientes de temperaturas altas y alcalinos, donde a las bacterias y virus les cuesta sobrevivir.
Durante los experimentos se logró reciclar entre el 49% y el 59% de los desechos.