Orinar en espacios públicos es algo que probablemente todos han hecho, pero en algunos sectores de la capital la situación se ha tornado compleja.
La Municipalidad de Santiago, para frenar el uso de calles, plazas y otros puntos como baño, realizó hace dos años un "inventario de urinarios" para encontrar puntos más recurrentes donde las personas hacen sus necesidades, el que, tras una actualización, destacó la existencia de diez puntos críticos en el centro.
Entre ellos se encuentra la Plazuela Santo Domingo, Calle Aillavilú —donde se ubica La Piojera—, el Club de la Unión, a un costado por Bandera, y Nueva York con Alameda, entre otros (ver detalle más abajo).
"El contrato que manejamos lo vamos a reemplazar por uno de lavado mecanizado que tiene varios servicios completos", dijo a La Hora Claudio Contreras, director (s) de Aseo de Santiago.
Para la autoridad, la venta de alcohol, las personas en situación de calle y derechamente la "falta de educación" son factores que inciden en que la gente orine tanto en el centro de la ciudad. "Es como el Día de la Marmota. Todos los días amanece sucio y todos los días limpiamos", agregó Contreras.
Actualmente la municipalidad cuenta con una hidrolavadora pequeña y dos grandes, además de tres camiones aljibe para la limpieza. Para marzo se espera sumar un servicio de restregado, lavado con mopa, lavado con pitón (aljibe) y barrido mecanizado, además de sumar dos nuevas hidrolavadoras.
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