El arquitecto, Miguel Lawner dijo por los guetos verticales que “en cinco, seis años, esos edificios van a ser virtualmente insalubres”. Además, señaló que “habla muy bien de Joaquín Lavín” mantener su postura respecto de esta iniciativa. “Espero que se transforme en una política pública significativa”, agregó el profesional.
Sobre los proyectos que dejan a las familias más pobres en la periferia de la ciudad, el también exdirector de la Corporación de Mejoramiento Urbano a comienzos de los ‘70 indicó que “tenemos que estar conscientes de lo que representa la segregación social urbana”.
Respecto de los llamados guetos verticales, Lawner postuló que “se trata de una explotación intensiva del suelo a niveles absolutamente por encima de todo lo que pueden las normas de mínima convivencia y de posibilidades de hacer ciudad admiten. Es inconcebible”.
Ejemplificó que “se han construido edificios de 100 metros de altura, sin antejardín, dando directamente a la calle a una vereda de un metro de ancho”, a lo que se debe agregar problemas con los ascensores porque no dan abasto.