Una mujer británica tuvo distintos tratamientos por una enfermedad intestinal grave y, tras no responder a los procedimientos, un médico decidió operarla. Al intervenirla descubrieron que tenía bolsas de kétchup que le habían perforado la pared del intestino.
Según el diario The Guardian, la paciente de 41 años tenía dos sachet del condimento, los que le producían dolor abdominal agudo e hinchazón que podían durar hasta tres días, por lo que le diagnosticaron la enfermedad de Crohn: Proceso inflamatorio crónico del tracto intestinal.
La intervención quirúrgica se llevó a cabo en el hospital de Heatherwood y Wexham Park en la ciudad de Slough, donde le aplicaron una laparoscopia que consiste en la observación de la cavidad abdominal con un lente óptico.
Ahí hallaron las bolsas de kétchup, que fueron removidas, y al ser consultada por los especialistas, la mujer dijo que no recordaba cómo llegaron a su estómago ambos envases.