Fanáticos de Harry Potter y el café descubrieron un menú secreto en Starbucks que mezcla ambos mundos.
El café quizás no es la representación más exacta de una "butterbeer", la bebida de fantasía dentro del mundo creado por JK Rowling, pero sí ha conseguido a varios adeptos.
Existen dos diferentes opciones disponibles para los Potterhead: el latte butterbeer y el frappucino butterbeer para aquellos que buscan algo más frío.
Un latter butterbeer consiste de leche entera evaporada con dos shots de espresso, dos shots de jarabe de caramelo, tres shots de jarabe de toffee y tres shots de jarabe de canela dulce, cubierto con crema batida y trozos de caramelo. La bebida tiene 402 calorías y 58 gramos de azúcar, siendo 25 gramos lo que recomienda la OMS.
Por otro lado, un frappucino butterbeer está hecho de una crema para frappucino mezclado con tres shots de jarabe de caramelo y tres shots de jarabe toffee de nueces. Este último es menos sano que el anterior ya que tiene 430 calorías y casi 66 gramos de azúcar.