El joven islandés Árni Sigurdsson quiso hacer un show de fuegos artificiales para sus vecinos para recibir el 2018, pero todo salió mal. Los conocidos riesgos de manipular pirotecnia se concretaron y el video se transformó en viral.
El clip fue publicado en YouTube, donde se puede ver cómo un error al prender los fuegos salieron en otra dirección y explotaron en sus narices, donde afectó a los vehículos que estaban en su barrio.
Nadie resultó herido y el fallido espectáculo se transformó en el primer fail del 2018.