La machi Francisca Linconao llegó hasta la casa de la Madre de la Santa Cruz, en Temuco, con la intención de entregarle una carta al Papa Francisco, pero no consiguió su objetivo. En el texto, la autoridad mapuche expresa su deseo de que el líder católico interceda en el segundo juicio en su contra por el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay, luego de que los once comuneros imputados fueron absueltos durante el primer proceso.
"Le pido que invite al Estado de Chile a revisar mi situación e intervenga en este nuevo juicio, en el cual los fiscales de este país intentan condenarme a 40 años de cárcel, sin tener pruebas en la carpeta investigativa, sin yo tener ningún vínculo en este horrible crimen, pues ya ha quedado demostrado", señala la carta que escribió para Francisco y que publicó Radio ADN.
"Si Ud. averigua un poco, se dará cuenta que en Chile sólo a los Mapuche se nos aplica la Ley Antiterrorista, no se nos respeta la presunción de inocencia, la prisión preventiva es extremadamente larga y sin justificación", agrega el texto.
"Ya lo dije en un medio de comunicación local: Ud. y yo somos Autoridades Espirituales, y podemos dar muestra del respeto que debe existir entre las personas que habitamos esta tierra, sin embargo, debido a la persecución en mi contra, no he podido vivir mi espiritualidad", concluye el documento.