La reciente entrega de los premios Grammy no estuvo exenta de polémica, luego que Lorde rechazara presentarse en la ceremonia.
Según publica el portal TMZ, la neozelandesa —una de las nominadas en la categoría Álbum del año— rechazó subirse al escenario en el Madison Square Garden y tampoco se presentó en la alfombra roja, porque no se le permitió tocar una de sus canciones. Los organizadores del premio, en cambio, le ofrecieron ser parte de un tributo al fallecido Tom Petty.
La artista estuvo en desacuerdo con esta oferta debido a que a sus contrincantes —todos hombres— sí se les permitió tocar solos e interpretando una de sus canciones.
La madre de la estrella del pop, Sonja Yelich, manifestó su pesar por la situación en redes sociales, y publicó una imagen de un reporte de The New York Times, que deja en evidencia la brecha de género que existen en las nominaciones de los Grammy.
"Esto lo dice todo", escribió Yelich en Twitter.
Mensaje oculto en su vestido
Además, la cantante asistió a los premios con un vestido que tenía un mensaje oculto, el que solidarizaba con las víctimas del acoso sexual y las integrantes del movimiento #MeToo y Time’s Up.
“¡Alégrense! Nuestros tiempos son intolerables. Armarse de valor para lo peor es un presagio de lo mejor. Solo las circunstancias pueden precipitar el derrocamiento de los opresores. Los viejos y corruptos deben ser destruidos antes de que los justos puedan triunfar. La contradicción se intensificará. El juicio se acelerará por la puesta en escena de las perturbaciones de las semillas. El apocalipsis florecerá”, decía el texto, un fragmento de Ensayos inflamables de Jenny Holzer.