Azis Ansari, el comediante y creador de la serie Master of None, fue acusado de abusos sexuales por una fotógrafa de 23 años, quien permanece en el anonimato.
Usando el alias de Grace, la joven comentó que conoció a Ansari el 2017, en la fiesta de los Emmy Awards, luego que ambos se dieran cuenta que habían llevado la misma cámara al evento.
La chica confesó que le dio su número y que se mantuvieron en contacto por una semana hasta que Ansari la invitó a salir. Grace contó que la llevó a cenar; luego fueron al departamento del actor, lugar donde confesó que las cosas "comenzaron a escalar rápidamente" cuando la joven dice que se sintió incómoda luego que Ansari dijera que buscaría un condón luego de besarla por primera vez.
Grace reclama que Ansari le tomaba la mano y la llevaba a su pene en varias ocasiones y que él la obligaba a permanecer ahí. Al día siguiente, la joven le envió un mensaje diciendo "quiero tomar este momento para que tomes conciencia por tu comportamiento y lo incómoda que me sentí". Ansari respondió "claramente, no comprendí bien las cosas en el momento y lo siento de verdad".
Ante las acusaciones, Ansari publicó un comunicado que puedes leer a continuación:
"En septiembre del año pasado, conocí a una mujer en una fiesta. Cambiamos números. Nos enviamos menajes y eventualmente salimos en una cita. Fuimos a cenar, y después terminamos en una actividad sexual, la cual bajo toda indicación fue completamente consensuado.
El día siguiente, recibí un texto de ella diciendo que pese "a que parece que estuvo bien", luego de algunas reflexiones, se sintió incómoda. Es cierto que todo parecía ir bien para mí, así que cuando me enteré que no era el caso para ella, estaba sorprendido y preocupado. Llevé sus palabras al corazón y le respondí de manera privada luego de tomarme el tiempo de procesar lo que dijo.
Continúo apoyando el movimiento de lo que está pasando en nuestra cultura. Es necesario y llevará mucho tiempo".
Read Ansari’s statement in full below:
“In September of last year, I met a woman at a party. We exchanged numbers. We texted back and forth and eventually went on a date. We went out to dinner, and afterwards we ended up engaging in sexual activity, which by all indications was completely consensual.
The next day, I got a text from her saying that although ‘it may have seemed okay,’ upon further reflection, she felt uncomfortable. It was true that everything did seem okay to me, so when I heard that it was not the case for her, I was surprised and concerned. I took her words to heart and responded privately after taking the time to process what she had said.
I continue to support the movement that is happening in our culture. It is necessary and long overdue.”