El académico de la UDP agregó que “sólo en Chile ocurre esta extraña figura” de empaquetadores sin contrato, y que “la inspección del trabajo no cumple su función” fiscalizadora.
En otro ámbito, se refirió a situación de quienes boletean, y aseveró que “de cada 10 contratos a honorarios que uno conoce, entre 7 y 8 son fraudulentos en mi opinión”, ya que hay una serie de obligaciones como un horario de ingreso u otros que obligarían a una relación contractual.
Respecto de los trabajos esporádicos en fiestas patrias, acotó que “si tú prestas servicios subordinadamente para otro, a cambio de dinero, lo tuyo es un contrato de trabajo”. Sin embargo, admitió que demandar a un empleador por este motivo es un procedimiento demasiado engorroso.