Una mujer acusó públicamente al director Roman Polanski de abusar sexualmente de ella en 1973, cuando tenía 16 años. Robin M., hizo una conferencia de prensa en Los Angeles, donde reconoció haber sido víctima de abuso.
Robin es la tercera en acusar al director de abuso, tras Charlotte Lewis en 2010 y de Samantha Geimer en 1977. Fue ante la voluntad de esta última de cerrar el caso que tenía contra Polanski, que Robin decidió contar su vivencia, según argumentó.
"Yo no lo he superado y creo que Roman Polanski debe pagar por sus delitos contra la menor de trece años Samantha Geimer", señaló la mujer de 59 años.
El creador de Chinatown se declaró culpable de haber drogado Samantha Geimer, y haberla obligado a tener relaciones sexuales con él, tras una sesión de fotos, en el juicio que se llevó a cabo en 1977. Polanski pasó 42 días arrestado, pero estando en libertad bajo fianza y ante el temor de tener que volver a prisión para cumplir una condena mucho más severa huyó de Estados Unidos a finales de 1978.
En febrero, presentó una serie de documentos para regresar a Estados Unidos y cerrar el caso sin tener que pasar por prisión, pero un juez de Los Ángeles rechazó su propuesta en abril.
Por su parte, Robin declaró que no había querido compartir con nadie su incidente, y la única que sabía era una amiga. No quiso decirle a su padre porque temía que "hiciese algo que lo llevase a la cárcel por el resto de su vida".
Ante las acusaciones, el abogado de Polanski, Harland Braun, cuestionó las declaraciones de Robin M. y aseguró que si tiene algo sólido en contra de Polanski debe ir al juzgado y presentar una demanda.