Una ducha es la mejor aliada para despertar en la mañana, para reponerse después de hacer ejercicio o entrar en calor en invierno.
Sin embargo, son varios los datos y estudios que apuntan a que, pese a lo que se podría pensar, ducharse más podría ser más nocivo que beneficioso, ya que el exceso de limpieza daña el conjunto de bacterias, virus y microbios del cuerpo: el microbioma humano.
Un estudio de la Universidad de Utah, realizado en una etnia indígena del Amazonas, los Yanomani. Estos, que no han tenido con el mundo occidental, tenían su microbioma con una alta diversidad, inclusi con bacterías que eran resistentes a antibióticos aún sin conocerlos.
Con esto, los especialistas concluyeron que la vida occidental afecta a la diversidad del microbioma humano, y por ende, a la salud.
Por ello, los expertos recomiendan duchas cortas y con agua fría y tibia, en vez de baño de tina, usar jabones neutros y no ducharse más de una vez al día.