Mauricio Pinilla sufrió un robo en su departamento mientras se realizaba el encuentro entre Chile y Alemania por la final de la Copa Confederaciones.
El exseleccionado descubrió el ilícito cuando tras el partido volvió a su hogar, ubicado en el sector de San Carlos de Apoquindo, comuna de Las Condes. Según sus estimaciones preliminares, el monto del robo podría superar los mil doscientos millones de pesos en especies, incluyendo relojes, joyas como los anillos de compromiso, chequeras y varios artículos deportivos.
Dentro de los objetos sustraídos también se encontraban los pasaportes de la familia del futbolista, quienes esta semana debían viajar de vuelta a Europa.
Gisella Gallardo, esposa del futbolista, explicó a Radio Bío Bío que al ingresar al domicilio muchas cosas estaban en el suelo y los artículos de valor, en su mayoría joyas guardadas en una caja fuerte y maletas, habían desaparecido. El jugador y su familia no se encontraban en la propiedad al momento del ilícito.
“Entraron caminando dos personas con los bolsos y se fueron caminando”, relató Gallardo, y comentó a Chilevisión que "estamos con miedo, con pena, shockeada la verdad. Más que el valor económico es el valor sentimental de una vida de sacrificios que se llevaron los delincuentes, y el shock emocional para los niños que vieron todo tirado y las puertas rotas".