El pasado 7 de julio, la Policía de Pamplona se llevó una gran sorpresa al ver que una mujer embarazada a punto de dar a luz iba a correr frente a los toros en San Fermín.
Según publica El País, la mujer —con ocho meses de embarazo— era extranjera y no tenía idea del detalle de la fiesta, y se disponía a correr el tramo entre Santo Domingo y la plaza del Ayuntamiento.
Los policías que hacen controles habituales para detectar a personas que no están en condiciones de correr se dieron cuenta de su avanzado estado de gestación y decidieron hablar con ella.
En eso sí, no hay ninguna norma que prohíba específicamente que una embarazada participe de la festividad, según explicó el portavoz de la Policía Municipal de Pamplona, Jesús Bariain. La ordenanza de los encierros sí prohíbe otras situaciones: que la persona esté alcoholizada o bajo efectos de alguna droga o que no lleve un calzado adecuado.
Todo fue un malentendido, según Bariain, quien reconoció que nunca antes se habían encontrado con una mujer con un embarazo tan avanzado dispuesta a correr. "Ella no era consciente del peligro. Decía simplemente: 'vine a la fiesta y estoy aquí'. Desconocía el funcionamiento del encierro. Simplemente se le explicó, y lógicamente salió del recorrido", detalló. La policía no registro los datos o nacionalidad de la joven, porque no cometió ninguna falta.