Tras la bullada polémica con el pastor Soto, José Miguel Villouta renunció al programa El Interruptor de Vía X.
A través de su página web el Otro Público, el presentador reveló que en marzo de este año le quitaron el control editorial del programa, para darle un foco más farandulero.
"El episodio de la semana pasada con el Pastor Soto, que causó impacto en Hispanoamérica, cuando este pisotea en mi cara la bandera LGBT, abrió un nuevo camino en la pauta de un espacio que ya había girado hacia las celebridades", argumentó.
A modo de ejemplo, Villouta contó que "para este jueves se programó hacer el show con el candidato presidencial José Antonio Kast. Eso implicaba que yo cantara karaoke y jugara con él. En un principio se quiso que yo hiciera lo mismo con el pastor, asunto al que me negué con vehemencia en varias ocasiones".
En esa línea, el animador disparó contra Kast y el religioso, a los que tildó de "aliados políticos".
"Hacen campaña para que yo no tenga derechos y atacan el centro de mi identidad, además de la del público LGBT por el que siempre he trabajado con determinación, gracia y la frente en alto, aún en épocas cuando era una audacia hacerlo", afirmó.