Espinoza lleva 20 años en nuestro país. “La desconfianza del chileno al extranjero se hace sentir en la calle”, explicó, a lo que Emanuel agregó que “para el haitiano que está recién llegado, es complicado” por idioma, idiosincrasia y clima. Sin embargo, “después de un año se adaptan, toman hasta terremoto”, dijo risueño el isleño. “Sólo tengo palabras de agradecimiento” hacia Chile, explicó emocionada Janet, ya que pudo estudiar y formar una familia en Santiago.