Chile superó por 3 goles a 1 a Venezuela en partido válido por las clasificatorias a Rusia 2018, encuentro que volvió a situar a La Roja en la zona de clasificación a Rusia 2018, pero que tuvo de dulce y agraz.
Cuando aún no se jugaba media hora de partido, el Equipo de Todos ya superaba por tres tantos a la Vino Tinto, lo que elevó las expectativas de una parcialidad que quería ver al seleccionado nacional barrer con su rival. Algo que finalmente no ocurrió, ya que en el segundo tiempo Chile se farreó varios goles, bajó el nivel y la visita logró descontar.
Cuando Salomón Rondón anotó el 1 a 3 para los llaneros, la incertidumbre se tomó el Estadio Monumental, y los hinchas comenzaron a pifiar. Esto desató la ira del portero Claudio Bravo. Molesto, el capitán de la selección las emprendió contra la parcialidad. “Qué están silbando hueón”, dijo desde la cancha.
"No se entiende cuando hay pifias de por medio, no se entienden las silbatinas cuando salimos jugando desde atrás. Cuesta entender cuando los hinchas nos silban", agregó tras el encuentro.
Por su parte, Arturo Vidal tuvo al menos cuatro ocasiones claras para alargar el marcador, pero no pudo concretar. El volante hizo un duro mea culpa por su rendimiento: "Fue culpa mía, me perdí cuatro goles solo", lanzó en la cancha. Luego, pidió perdón a los hinchas en redes sociales.