Prince murió el pasado 21 de abril, y su multimillonario patrimonio todavía no tiene un heredero. Es toda una teleserie que incluye un testamento perdido, hijos y esposas falsos que aparecen cada día y una empresa queriendo quedarse con todo.
Los reportes señalan que, de momento, la pelea está entre la hermana de Prince, Tyka Nelson, y sus cinco hijos, y la compañía aseguradora de Prince, que está gestionando la fortuna y quiere quedarse con ella. El problema es que, a cinco meses de su muerte, muchas circunstancias bochornosas han caracterizado el juicio.
Uno de ellos es la aparición constante de supuestas esposas e hijos ilegítimos del artista. Al menos cada semana, el juez Kevin Eide descarta a un nuevo heredero, que resulta ser falso. A eso se suman primos, sobrinos, hermanos y amigos, que aseguran haber estado en el testamento y por ende merecen quedarse con todo.
El problema es que hasta la fecha todavía no se encuentra un testamento verificado, y de momento, quienes gestionan a fortuna son el abogado de Prince, L. Londell McMillan, quién era además su manager y amigo desde hace muchos años, y Charles Koppelman, ejecutivo de la industria.
De no aparecer el testamento, será la hermana de Prince, Tyka, quién se quede con todo. Tyka tiene cinco hijos, y se dice que eran muy cercanos a Prince. El problema es que la compañía aseguradora no se rendirá sin dar la pelea, y tienen muchos más recursos que Tyka para ganar la pelea.