La perfección física se ha transformado en un tema muy perturbador en mujeres y hombres. Con eso se junta el miedo al desnudo en pareja, la comparación, la luz encendida y el atractivo erótico. Obviamente, todos estos factores pueden afectar la vida sexual en pareja, es por eso que acá te contaremos de algunos tips para sentirte sexy con el cuerpo que tienes.
Según Lara Castro, psicóloga y autora del libro "Placer ConSentido", los primeros ejercicios de su libro tienen que ver con liberar la carga emocional que produce el cuerpo y resolver qué eso puede estar generando problemas en la vida sexual, inconscientemente. De acuerdo, a una nota de el periódico El Mundo, el objetivo del libro es que "la mujer entienda que la sensualidad no entiende de medidas ni de estereotipos".
En esta misma nota enumeraron un "entrenamiento básico" con las ideas de la psicóloga, que te pueden ayudar a aceptar tu cuerpo, "ganar autoestima y seguridad en el encuentro sexual" (Vía El Mundo).
1- Dejar de juzgar el cuerpo y aceptarlo. Olvidar detalles como arrugas y granos que nos incomodan y verlo como un todo. Olvidarse también de referentes de belleza e ideales estéticos que no corresponden con la realidad y, sobre todo, nada tienen que ver con la capacidad de desear y de sentirse deseado
2- Practicar la seducción con una misma. No podemos seducir a nadie, ni sentirnos deseadas, si antes no nos hemos seducido a nosotras. El valor que nos otorguemos es el valor que verán las demás personas.
3- No dejarse impresionar ni vencer por la presión que ejercen ciertos cánones de belleza. Y aunque sigue siendo más fuerte sobre las mujeres que sobre los hombres, lo cierto es que cada vez está más igualada.
4- Conocer el propio cuerpo. No podemos aceptarlo si no lo conocemos. Acercarse a él con amor y dirigirle la mejor de las miradas.
5- Una vez que hemos aceptado nuestro cuerpo, liderar nuestra sexualidad. Es decir, saber cuáles son nuestras zonas más erógenas y de qué forma estimularlas. Esto solo se consigue autoexplorándonos. Aunque tendamos a limitar la sexualidad a la zona genital, el cuerpo está lleno de rincones que esperan ser descubiertos para proporcionarnos placer.
6-Un excelente ejercicio es aprender a disfrutar de los cinco sentidos, abrir el cuerpo a experimentar con ellos, concentrando toda la atención en esta práctica. Sentir el agua en la ducha, poner una canción que nos gusta, deleitarnos con nuestros olores favoritos... Darle espacio al placer en nuestras vidas y comenzar a establecer los pilares de una buena autoestima, valorándonos por lo que somos y no en función de las creencias, los juicios y los mensajes que hemos ido recibiendo a lo largo de la vida.
7- Por último, reflexionar sobre cómo estamos viviendo la sexualidad, cómo la queremos vivir y qué cambios necesitamos hacer. En definitiva, revisar nuestros pensamientos y aprender a gestionar nuestras emociones para cumplir nuestros objetivos en esta área de la vida y poder disfrutar de ella.